lunes, diciembre 22

Es el Samurai un ejemplo a imitar II?

El libro del samurai el Hagakure fue escrito en los inicios del siglo XVIII, ya cuando la epoca de mayor apogeo de los samurais habia pasado.
Asi lo prueba el mismo texto :"Los tiempos han cambiado mucho en el transcurso de estos últimos treinta años. En nuestros días, cuando los jóvenes Samurais se reúnen, hablan de dinero, de
provecho, de pérdidas, de la manera de administrar su casa, de los criterios para juzgar el valor de la vestimenta, e intercambian opiniones profanas"

El Hagakure se trata de un código ético estricto y particular al que muchos samuráis (o bushi) entregaban sus vidas y que exigía lealtad y honor hasta la muerte.
En la obra resalta el tema de la muerte como tema presente y permanente.

Por ejemplo algunas citas:

"El samurai valiente no piensa en terminos de victoria o derrota, combate fanáticamente hasta la muerte"

"Si quiere estar dispuesto a morir, un samurai debe considerarse ya muerto".

"Es seguro que un samurai que no esta preparado para morir, morirá de una muerte poco honorable, en cambio si consagra su vida a preparar su muerte, ¿Cómo podría tener un comportamiento despreciable?"

"Si uno duda entre comer y no comer, más vale abstenerse. Cuando
uno no puede decidirse entre vivir o morir, entonces más vale morir."

Como se ve, la obra que resume el codigo bushuido del samurai posee una fijación en el tema de la muerte como el punto al cual el samurai debia consagrarse.

Quedando establecido de por donde hiba para el samurai el tema del honor, cabe preguntarse si acaso los que preguntan sobre cuestiones de honor en esos balotarios que buscan asociar solapadamente la practica del Aikido convencional con la tracidion samurai, ¿consideran siquiera de soslayo el tema de morir para preservar el honor?.
La historia del aikido convencional, tan plagada de rupturas, mentiras y traiciones que rayan en la cobardia nos demuestra que intentar emularse en temas de honor con los samurais resulta una ironia. Todo apunta a señalar que se trata sencillamente de poses y nada mas que poses. Poses huecas que no se condicen con la realidad histórica y con su practica habitual. Una Sujeción irracional a practicas y tradiciones anacronicas, agravado por la renuncia a siquiera formalizar un randori aceptable, menos hablar de competición y aunado a una liturgia de etiquetas exageradas,temas estos que alejan cada vez mas al Aikido convencional de la marcialidad del budo.

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